La remodelación de la plaza San Martín le cambió el look al centro de la ciudad, con una fuente de agua, luces LED, nuevas veredas y senderos, bancos con paneles solares y la peatonalización de la calle Yrigoyen.

Parecieron interminables los 199 días que estuvo cerrada -el plazo inicial era 150-, pero tanta espera valió la pena: el intendente Ariel Sujarchuk inauguró el lunes 22 la remodelación de la plaza principal de Belén de Escobar y la peatonalización de la calle Hipólito Yrigoyen al 600, que le otorgan al centro de la ciudad un aspecto completamente renovado y más moderno.

“Estamos muy felices, porque llegó el día que todos estábamos esperando y la verdad es que este lugar quedó como se merecía. No se trata de una plaza, se trata de recuperar y revalorizar los centros urbanos de las localidades, como venimos haciendo en todo el distrito”, expresó el jefe comunal en su alocución durante el acto inaugural.

La puesta en valor de la plaza San Martín incluyó su renovación integral. En el centro se implantó una fuente de agua para jerarquizar el monumento al prócer, mientras que la calle Hipólito Yrigoyen al 600 se reconstruyó como una extensión del espacio verde, con adoquines en reemplazo del pavimento y nivelada a la altura de la vereda, bolardos (postes) de hormigón que delimitan las aceras, rejillas e iluminación empotrada en la calzada.

La plaza cuenta también con 44 bancos de hormigón -más del doble que antes- y otros de madera. Varios de ellos tienen paneles de energía solar y puertos de USB donde la gente puede recargar la batería de los teléfonos celulares y otros dispositivos móviles con energía sustentable. Toda una novedad.

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Los monumentos, placas, bustos y estatuas existentes fueron restaurados, se reemplazaron las luminarias que había y se instalaron más artefactos LED y cámaras de seguridad. Además, se colocaron baldosas en damero para embellecer los caminos con distintos colores: bordó en las veredas perimetrales y gris en el centro. Y en todas las esquinas hay rampas para facilitar el acceso de personas con movilidad reducida.

“El pueblo de Escobar tiene ahora una plaza cívica a la altura de su gente y de su historia, de su idiosincrasia, que respeta los valores tradicionales y que, a su vez, cuenta con todo lo bueno de la tecnología, empezando por el wifi, pasando por un sistema de riego de última generación y terminando en los bancos con paneles solares”, afirmó Sujarchuk.

El intendente también expresó su deseo de que la remodelada plaza “siga siendo un símbolo de la unión de los escobarenses, un punto de encuentro, inclusive desde las diferencias”, al tiempo que pidió a los vecinos que la cuiden.

La obra se financió con $16 millones aportados por la empresa Consultatio. No fue una donación sino por el canje de tierras fiscales enclavadas dentro de las 1.400 hectáreas del megaemprendimiento urbanístico Puertos. Su dueño, el magnate Eduardo Costantini, recorrió la plaza antes del acto junto al intendente y su comitiva. “Tengo el orgullo de haber logrado que quienes vengan a usar la tierra de Escobar para desarrollar sus actividades inviertan también en el espacio público”, remarcó Sujarchuk.

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