El laboratorio Biogénesis Bagó se asoció con un par chino para producir en ese país la vacuna antiaftosa. Para eso, un grupo de profesionales asiáticos se entrena exhaustivamente en la planta escobarense. Apuntan a fabricar 400 millones de dosis anuales.

Por FLORENCIA ALVAREZ
falvarez@dia32.com.ar

Los chinos son gigantes y avanzan por el mundo a pie firme sellando acuerdos comerciales. No es ningún secreto que son capaces de exportar cualquier cosa. Lo comprueba cada etiqueta “Made in China” que leemos en los cientos de productos que utilizamos cotidianamente. Pero con más de mil trescientos millones de habitantes, la república popular también necesita abastecerse de cosas del afuera para consumo del mercado interno.

Entre esas cosas se encuentra la fórmula para producir la vacuna contra la aftosa, que vinieron a buscarla a la Argentina, más precisamente a la planta que Biogénesis Bagó tiene en Garín. Para eso, 14 chinos “sub 30”, profesionales de las áreas de veterinaria, biotecnología y ciencias biológicas se entrenan desde junio, y hasta noviembre, en las instalaciones de la empresa.

En el contexto de apertura económica, política y social que han tenido los chinos en los últimos años, Argentina no ha quedado fuera de la torta. Durante la última década los negocios han crecido un 10%. De hecho, detrás de Brasil, nuestro país es su segundo socio comercial, con exportaciones a Oriente por 6.358 millones de dólares en 2013.

Sin ir más lejos, días atrás el presidente chino Xi Jinping visitó estas pampas para firmar veinte acuerdos comerciales con el gobierno argentino, entre los que se encuentra la mayor inversión de China en el extranjero: la construcción de las represas santacruceñas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic. Pero no solo eso, porque el primer mandatario vino acompañado por una comitiva de empresarios que firmaron preacuerdos con los ejecutivos locales por mil millones de dólares.

Sucedió en una reunión en el Hotel Intercontinental, donde la avidez de los argentinos por conquistar a los chinos fue alevosa. Hay que admitir que mal no les fue: un sinfín de rubros se fueron con una sonrisa en la boca, desde productos de soja con valor agregado, hasta carne congelada, mariscos, lanas, frutas, jugos, maderas, glicerina y vinos.

Sin embargo, el acuerdo entre Biogénesis Bagó y su socio chino Hile Biotechnology se había firmado con anterioridad, en octubre de 2013, luego de casi 13 años de negociaciones, con la intención de derrotar una enfermedad que afecta al ganado vacuno, ovino, porcino y caprino, altamente contagiosa y que genera pérdidas multimillonarias para los productores.

Tecnología de punta

El predio de Garín cuenta con 56.530m2, desde ahí se desarrollan vacunas de alta calidad para animales destinados a la producción de carnes y leche. Se destaca por su alta capacidad tecnológica y de innovación. Dentro de él funcionan tres unidades de producción segregadas, una para la vacuna antiaftosa con capacidad de producir 200 millones de dosis anuales, otra para vacunas virales y bacterianas -100 millones- y la restante para la rabia -40 millones-.

En las nuevas instalaciones chinas, que estarán listas en 2016, proyectan fabricar en una primera instancia 400 millones de dosis, es decir, el doble que en Argentina. Un número que suena exorbitante pero que no lo es tanto si se tiene en cuenta que el gigante asiático requiere de 1.800 millones de dosis anuales. A eso se debe que Biogénesis Bagó no está solo en el mercado chino sino que también hay otros oferentes.

El proyecto entre la empresa oriental y Biogénesis contó con una inversión inicial de 60 millones de dólares y se está llevando a cabo en la ciudad de Yangling, provincia de Shaanxi. HILE Biotecnology Co es una compañía privada que elabora vacunas de alta tecnología para aves y cerdos. La asociación está focalizada en la producción y comercialización de la vacuna antiaftosa con planes de, en un futuro, exportar a toda la región.

Entrenamiento exhaustivo

Para los jóvenes profesionales provenientes de Oriente no es fácil encontrarse en un país con costumbres tan extrañas, sobre todo porque no pronuncian una sola palabra en castellano y apenas si balbucean el inglés. Una traductora y dos asistentes los acompañan permanentemente, ya que esta es una etapa clave. Se están preparando para la transferencia tecnológica durante la que se busca trasladar los conocimientos y capacidades de los profesionales de Biogénesis a quienes serán los responsables de las diferentes áreas que operarán la planta en China. Es decir, de ellos dependerá el buen funcionamiento del ambicioso proyecto.

Durante su estancia en suelo escobarense se alojan en departamentos cercanos a la planta. Se capacitan en horarios rotativos, mañana, tarde y noche. Habitualmente el grueso del trabajo se realiza de 8 a 17, pero muchas veces concurren en el horario nocturno para conocer en detalle cada uno de los procesos y etapas de producción, ya que la fábrica trabaja sin descanso durante los 365 días del año.

Seguridad total

La fiebre aftosa es una enfermedad viral del ganado, de alto impacto económico y altamente contagiosa. El virus debe ser manipulado bajo condiciones de bioseguridad para evitar su transmisión a los animales susceptibles, aunque no es contagioso a los humanos ni otros primates.

La planta de Garín se caracteriza por activar medidas de bioseguridad nivel 4, el más alto que existe. Es que la enfermedad es capaz de viajar en el aire a 80 kilómetros diarios, por ello las normas de precaución son tan estrictas y cuidadas.

Los métodos que se utilizan para construir este tipo de plantas son muy complejos, ya que hay parámetros regulatorios que cumplir, deben ser áreas rigurosamente asépticas. Algo parecido a la NASA o, en todo caso, a un quirófano, con detalles como una doble pared, zócalos sanitarios redondeados, como los de los sanatorios, que facilitan una eficiente limpieza y desinfección.

Las paredes son de un material llamado epoxi, que también garantizan la limpieza y la no adherencia de ninguna partícula. También hay doble vidrio en cada sector. Son áreas que se llaman “deprimidas” con respecto al sistema de circulación de aire, esto quiere decir que poseen manejadoras de aire con unos filtros especiales llamados HEPA.

El área de aftosa posee un manejo de aire que equivale tres veces a los que se utilizan en gigantescos shoppings como el Abasto. Además, el edificio posee su propio sistema de generación de energía y cuenta con tres sistemas de back up.

Pero las medidas de seguridad no solo se reflejan en la forma en que está construida la planta, sino que todas y cada una de las personas que allí trabajan deben colaborar para que ahí adentro no vuele una mosca. Para eso pasan por un proceso de acceso muy riguroso.

Cada empleado posee una clave personal e intransferible que ingresa en unos teclados ubicados en el área exterior. Son puertas enclavadas que poseen un burlete especial que garantiza el sellado. Antes de entrar deben dejar sus pertenencias y pasar por una ducha obligatoria, cepillar prolijamente sus uñas, limpiar sus fosas nasales y dejar fuera todo tipo de accesorios, desde lentes y anillos hasta relojes y celulares. Tienen esos mismos elementos por duplicado, unos para utilizar adentro y otros afuera del área protegida. Cada vez que entran o salen cumplen con estos pasos.

El personal de área biosegura está altamente calificado, han pasado por otras áreas de la compañía y recibido un entrenamiento especial. Pero el compromiso se extiende también a la vida privada, ya que como prevención deben firmar una cláusula que les impide visitar zoológicos, circos, tener mascotas en sus casas o acercarse a animales.

De esta manera continúa el intercambio de bienes entre la Argentina y China, que en este caso no tiene que ver con productos tangibles sino con conocimiento, con ciencia, con materia gris, un recurso que es la puerta de entrada a negocios millonarios.

LIC. MARÍA DE LOS ÁNGELES DE SAN SEGUNDO, JEFA DE RR.II. DE BIOGÉNESIS BAGÓ

“Este proyecto es un gran desafío para nosotros”

¿Qué significa para una empresa como Biogénesis Bagó este convenio con China en relación a que es un negocio que les permitirá una importante expansión?

Este proyecto es un gran desafío para nosotros, el cual permitirá una gran expansión en el continente asiático. Además, es la primera empresa extranjera que ha sido seleccionada para llevar adelante un Joint Venture con un socio local, como lo es HILE Biotechnology. Biogénesis Bagó es uno de los mayores productores de vacuna antiaftosa a nivel mundial. Desde 2006 es la única proveedora de Latinoamérica adjudicataria de la licitación internacional del Banco de Antígenos y vacunas de Norteamérica, que asiste las necesidades de Estados Unidos, México y Canadá. Además, es la única empresa del mundo autorizada a distribuir y comercializar la vacuna en caso de emergencia en Estados Unidos y Canadá.

¿En el marco de qué acuerdo se generó este negocio?

En el marco de un acuerdo de cooperación binacional que llegó a lograrse gracias a la intervención de los ministerios de Agricultura, Ganadería y Pesca de Argentina y de Agricultura de China.

¿Para qué fecha planean inaugurar la planta de Shaanxi?

La construcción de la planta se inició en marzo de 2014 y el proyecto contempla alrededor de 18 meses. Esperamos que en 2016 ya se encuentren disponibles los primeros lotes de vacunas antiaftosa producidos en la República Popular de China, las que serán inicialmente destinadas a la comercialización en ese mercado.

¿Cuáles son las características de la planta china?

Contará con las mismas particularidades de última tecnología y con los mismos estándares de calidad y normas que nuestra planta elaboradora de Garín. Mantiene el nivel de Bioseguridad 4 OIE, además posee certificación de GMP (por sus siglas en inglés: Buenas Prácticas de Manufactura), que garantiza la trazabilidad de sus productos en cada etapa de producción, ISO 9001 e ISO 14001 (Sistema de gestión de medio ambiente).

¿En base a qué cualidades fueron seleccionados los 14 jóvenes profesionales asiáticos?

El criterio de selección fue formar un equipo multidisciplinario que trabajará en equipo en la planta de China, los cuales provienen de diferentes carreras afines. Al momento de la selección de recursos humanos se tuvieron en cuenta experiencias en el campo de la Biotecnología, sus actitudes y aptitudes. Son profesionales con muchas ganas de crecer y aprender.

¿Piensan exportar al mundo desde la planta en China o sólo producir para el mercado interno del país?

La asociación estará focalizada en la producción y comercialización de la vacuna antiaftosa en la República Popular de China para abastecer el mercado interno y además exportar a toda la región asiática.

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