Las largas colas de usuarios frente a la oficina comercial de la empresa fueron la postal diaria de enero. Desde la compañía culpan al gobierno nacional por la suba tarifaria y aseguran que invierten “a pesar de perder plata”.

A esta altura no es ninguna novedad que miles de escobarenses sufren cotidianamente sorpresivos cortes de luz, que pueden durar dos minutos, un par de horas o días enteros. Incluso en jornadas con temperaturas usuales para el verano o sin tormentas.

Pero ese no es el único motivo por el cual desde fin año y durante todo enero los clientes hacen interminables colas frente a la oficina comercial que Edenor tiene en la calle Sarmiento al 400. Las quejas no eran solamente por los cortes de luz sino también por facturas que no llegaban, avisos de corte recibidos antes que las boletas y alarmantes sobrefacturaciones.

“A fin de noviembre se puso en marcha un nuevo sistema comercial, que le costó a la empresa 18 millones de dólares. Cuando sucede eso en una empresa con más de 2.700.000 clientes siempre se producen desajustes iniciales. Es por eso que hubo más gente de lo normal en muchas oficinas comerciales”, explicó a DIA 32 uno de los voceros de Edenor, Roberto Lipi, en cuanto a las facturas que no arribaron a destino en tiempo y forma.

Además, desde el 1º de diciembre comenzó a hacerse el balance anual del “factor de estabilización eléctrico” que dispuso el gobierno. “Por eso en algunos casos se le cobró al cliente una suma importante que no se le había cobrado por los consumos reales que había tenido en los meses anteriores”, argumentó Lipi.

“Al consumidor que veíamos que había tenido un consumo menor al bimestre anterior, la factura le vino más abultada. Pero claro, el cliente no lo lee y se queja. Es que todos los ítems que va imponiendo el gobierno hacen que la factura sea bastante difícil de digerir, y entonces pide explicaciones”, agregó el vocero.

¿A qué se debió el apagón del 24 de diciembre que dejó a miles de usuarios sin luz en Nochebuena y durante tres días?

Ese día hicieron 50 grados se sensación térmica. En ningún lugar del mundo, con esas temperaturas, la situación pasa sin consecuencias. Eso es porque la gente conecta al enchufe todo lo que tiene. Hacían 50 grados acá y en Rusia se morían de frío y también había apagones por todos lados porque trataban de calentarse utilizando electricidad. Los cables se quemaban y los fusibles saltaban por el exceso de demanda.

Y la falta de mantenimiento…

No, es lo mismo que pasa en una casa si se enchufan 20 planchas a la vez… salta todo, porque el sistema no está preparado para tener semejante demanda de energía al mismo tiempo. En un momento los cables no tienen más capacidad de transporte de energía.

¿Cuál es el motivo de los cortes de luz que se dan a diario en distintos lugares del distrito?

No puedo decir cuál es el inconveniente en Escobar puntualmente, pero es sabido que la empresa tiene problemas económicos y financieros. Estamos invirtiendo algo más de un millón de pesos diarios, mientras que anualmente perdemos alrededor de 500 millones de pesos. A partir de este nuevo cargo que dispuso el gobierno, de una suma fija que se agrega al consumo para obras públicas, vamos a invertir mil millones de pesos por año. Obviamente que habría que invertir más para mejorar la calidad del servicio, pero hacemos lo mejor posible.

Puertas cerradas

Después de los incidentes del jueves 26 de diciembre, que dejaron como saldo la rotura de vidrios del local de la calle Sarmiento, Edenor mantuvo su oficina cerrada durante una semana. Pero Lipi aclaró que la medida no se debió a los desmanes causados por algunos usuarios sino a una cuestión general de seguridad.

“En esos días varias oficinas de la provincia estuvieron cerradas porque no había policías disponibles y el sindicato de Luz y Fuerza no permite trabajar sin ellos porque en esos lugares se maneja dinero. Por eso hubo que contratar gendarmes”, explicó.

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