Viene de ganar una medalla de plata en el Mundial de Taekwondo que se realizó en Alemania, donde partió maderas de hasta 2,5 pulgadas de espesor. “Haber representado al país fue algo hermoso”, confiesa.

Javier Rubinstein
Daniel Mukden era un experimentado y prestigioso piloto comercial. El mejor y más querido del Aeroclub de Escobar. Pero se estrelló cuando iba a aterrizar y murió al instante. Investigan qué pasó.
Con solo 19 años, se ganó un lugar en el equipo de Armenio que acaba de lograr el ascenso a la Primera B Metropolitana. “Estoy viviendo algo único”, afirma el habilidoso volante escobarense, feliz por su presente.
Tiene 40 años y nació con hipotiroidismo congénito, lo que le produjo un retraso madurativo y dificultades para comunicarse. Pero él no afloja, trabaja en una pizzería y se hace querer por todos.
No hay carrera donde no compita, se destaca haciendo podios y es dueña de un físico privilegiado. A los 40, dice que está en su mejor momento y que el atletismo “es un estilo de vida, no puedo dejarlo”.
Dice que no haber llegado a boxeador profesional es su gran frustración. Pero está contento con sus logros. En los ´90 estuvo al frente del mítico bar La Vieja Esquina y hace 18 años maneja un kiosco y una panchería en la estación.
De pibe llegó a correr en la Fórmula 3 Española y en TC 2000. Pero dejó las pistas y hace nueve años se volcó al automovilismo radiocontrolado. Vive en Maschwitz y es el primer argentino en consagrarse campeón mundial. “Me cambió la vida”, afirma.
Tiene 10 años, hace cuatro dejó Escobar para ir a España con su familia y juega en las inferiores del Atlético Madrid. Es capitana de su equipo y sabe lo que quiere: “Sueño con llegar a la Selección”.
Ella perdió la vista a los 7 años y él cuando era bebé. Se conocieron en un curso de trabajo y se pusieron de novios. Tienen una hija adolescente y enfrentan las adversidades del día a día con una fortaleza admirable.
Tiene 24 años, es de Garín y lleva diez peleas invicta como profesional. Ya ganó los cinturones argentino, sudamericano y latino de la OMB en la categoría peso ligero. Pero quiere más y va por todo.
Juega en Sportivo Escobar, tiene 13 años y viene de probarse en el Real Madrid, donde vivió una semana inolvidable. “Quiero seguir y vivir del básquet”, asegura, convencido.
Tienen 15 años, juegan al tenis hace diez y juntas son dinamita: en los Bonaerenses ganaron la medalla de oro sin perder un solo set. Viven en Garín y sueñan con ser profesionales.
Vive en Ingeniero Maschwitz, tiene 18 años recién cumplidos y ganó una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de la Juventud. Además, ya fue campeona argentina y de los Odesur. “Soñaba con todo esto”, asegura.
Al lado del teatro abrió sus puertas un coqueto restaurant, ideal para estirar la salida tras una función. Cuenta con menús diarios y está por inaugurar un patio cervecero, con shows en vivo.
Tres atletas escobarenses participaron del Mundial Ironman 70.3 en Port Elizabeth, donde lograron buenos resultados. De regreso, compartieron con DIA 32 sus impresiones sobre un país signado por la desigualdad, la diversidad étnica y una flora y fauna únicas.
Tiene 18 años, estuvo en dos mundiales y fue campeón sudamericano de wushu, un arte marcial chino que maneja a la perfección. Estudia kinesiología y cuando deje de competir quiere ser entrenador.
Cuatro futbolistas oriundos del distrito serán protagonistas del próximo torneo local: Bruno y Franco Zuculini, Ariel Rojas y Raúl Bobadilla. Todos compitieron en el exterior y hoy el fútbol argentino los vuelve a juntar.
Amante de las tradiciones, siempre está presente en cada peña o festival que se haga. Compone versos y se dio el gusto de compartir escenarios con el “Chaqueño” Palavecino. Un personaje entrañable, vital, optimista y emprendedor.
Hijo de un matrimonio de pilotos, vive en Ingeniero Maschwitz y con 17 años ya compite en el circuito europeo, donde lidera el campeonato de la Fórmula Renault VDV. Una nueva promesa del mundo tuerca.
A los 38 años está en la cima de su carrera: es campeón argentino y acaba de salir segundo en el Arnold Classic de Brasil. Horas de entrenamiento y una dieta exigente, que incluye varios suplementos y 27 claras de huevo por día.
Nacido y criado en la ciudad, trabajó en el corralón de Rizzardi, en la Fiesta de la Flor y también junto a su hermano: en la agencia de seguros y en la Intendencia. Simple y frontal, hoy disfruta de estar jubilado, con tiempo para todo.