Por CIRO D. YACUZZI
cyacuzzi@dia32.com.ar
El nuevo debate en el Congreso de la Nación es la disminución de la edad de inmutabilidad de los menores de 16 a 14 años, para que en caso de delitos graves sean condenados, aunque con penas inferiores a las de un mayor. En apariencia, la medida colaboraría con la seguridad pública. Pero mientras las causas que originan la delincuencia sigan sin atenderse con la profundidad necesaria, es razonable cuanto menos dudar de la eficacia de esta sola acción, que no obstante la sociedad, o gran parte de ella, reclama a gritos.
Con vasta experiencia en la problemática de la minoridad, el abogado escobarense Horacio Téliz avala la implementación de un nuevo Régimen Penal Juvenil, aunque advierte que “no servirá para nada” si no se lo acompaña de profundas políticas sociales.
“Estoy de acuerdo en que a un menor de 14 años que comete un delito se le aplique una condena especial, pero ¿adónde lo mandamos? Los institutos de menores están colapsados, son de terror, no tienen las condiciones mínimas de habitabilidad, los chicos viven hacinados y están todo el día sin hacer nada. Así no van a mejorar su conducta cuando salgan. El problema va mucho más allá de bajar o no la edad de imputabilidad. Esto es una arista de un problemón, que es la inseguridad», opinó para DIA 32.
En la misma línea, amplió su crítica sobre la pésima infraestructura y la falta de contención en los establecimientos que alojan a los menores. “En la práctica son todo lo contrario a la teoría: la gran mayoría son pocilgas, en las cuales los chicos están depositados en habitáculos reducidos, con poca ventilación y donde se permite demasiado roce entre ellos, lo que hace que se vivan peleando porque están ociosos”, señaló.
Juez de Menores de Zárate-Campana desde 2004 hasta fines de 2007 y actual asesor de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia del Municipio -además, fue secretario del Juzgado de Paz de Escobar entre 1981 y 2004-, Téliz sostuvo que “hay soluciones inmediatas y mediatas”. Y especificó: “La inmediata seria que el Estado cree un sistema de prevención que le dé protección a la gente, y la mediata, que nadie quiere tomar y es a 30 ó 40 años, es trabajar sobre la educación, que juega un rol protagónico, la crisis de valores, la droga, la familia y la falta de autoridad. No hay otra solución».
A la hora de buscarle explicaciones a que no se avance en la dirección sugerida, analizó que se trata de algo “muy complicado, porque requiere de un trabajo profundo y, además, los resultados no se ven en forma inmediata”. Además, “hay muchos que se hacen los giles y miran para otro lado. Ese es el tema: nadie asume la responsabilidad que le corresponde”.
En su análisis, Téliz también manifestó que “esto no es nuevo. Haciendo memoria, esto ya se señaló en 1954, cuando se bajó la edad de imputabilidad a 14 años. Y en 1980, el gobierno de facto la modificó a 16. Pero esto es como darle una aspirina a un enfermo de cáncer, puede dar un efecto tranquilizante, pero no es el quid de la cuestión”, insistió. Además, recordó que desde el año pasado la provincia de Buenos Aires tiene un proceso penal especial para los menores, previsto en la ley 13.298. “Y esto nadie lo dice”, indicó.
“Mirando hacia delante, ¿cómo vemos a la sociedad dentro de diez años? Yo, la verdad, no me animo a decirlo. Pero el panorama es muy desalentador. No es una cuestión de este gobierno, porque hace mucho tiempo que el Estado no da respuestas a esto. Entonces, cada año que pasa es peor”.
Como conclusión, Téliz advirtió que “si no crean instituciones y programadas adecuados» la implementación de un nuevo régimen lejos estará de ser una solución, aunque sea parcial. Por el contrario: “Vamos a tener un problema más grave”.