Ideas de vanguardia orientadas hacia la educación, el saber y el entendimiento se multiplican en el distrito. Así como en Belén de Escobar se inauguró en abril un Centro de Educación Lúdica Interactiva (CELI), ahora llegó a Garín el Galpón de las Ciencias: un centro de divulgación del conocimiento con juegos aplicados a las diferentes disciplinas científicas.
El Galpón de las Ciencias se creó en un amplio espacio abandonado de la estación de Garín, detrás del microestadio. Tiempo atrás allí funcionó una cooperativa y hasta hace poco un corralón de materiales, pero en los últimos años estaba en desuso. Se accede desde el boulevard Perón, a la altura de Las Heras, por un sendero peatonal que conduce al galpón y a su playón exterior, que se utilizará para shows y diferentes actividades con público al aire libre.
Atravesar su enorme puerta de chapa es ingresar a un mundo lleno de sorpresas. Está compuesto por quince stands que de forma lúdica aportan conocimiento. Hay visores de 3D que muestran zonas desconocidas de la galaxia, con imágenes exclusivas tomadas por la NASA. Los telescopios cuya imagen se proyecta en pantallas especiales permiten ver nítidamente diferentes hojas de plantas, insectos e infinidad de objetos.
Los juegos con péndulos son de los más atractivos; dos puestos están dedicados a ellos. En el primero hay uno gigante que trabaja sobre una caja de arena en la cual se van imprimiendo los movimientos de quien lo accione. Debido a este fenómeno de oscilación, cada persona puede dejar su marca aunque sea por el tiempo que lleva un suspiro. Por otro lado, el armonógrafo trabaja con dos péndulos que combinados logran diseños extraordinarios.
Está también el infaltable juego de espejos, para verse mejor, peor o de las formas más extrañas y divertidas. Conocer cómo funcionan los caleidoscopios y las propiedades de la reflexión infinita es otra de las opciones, así como también los juegos de ilusión óptica o las mesas para entender la idea del equilibrio.
Otro puesto habla sobre los grandes inventos argentinos y también se explica cómo funciona un motor, entre muchas otras cosas maravillosas para aprender.
La ingeniosa propuesta está pensada para personas de todas las edades -5 años en adelante-, ya que todo lo que allí hay es adaptable a los intereses de las distintas etapas de la vida.
“Es una propuesta pedagógica donde los box de actividades no tienen tanto que ver con las computadoras -aunque las hay- sino con experimentos de matemática, física, astronomía, mecánica, con las ciencias duras, que se comprueban viéndolos funcionar”, explica a DIA 32 la directora general de Educación del Municipio, Diana Yacuzzi.
Bienvenidas las escuelas
Dentro del recinto hay cinco personas que trabajan dando acompañamiento durante las visitas. Explican cómo se usan las máquinas y cuál es el efecto que se está llevando a cabo en cada momento.
De miércoles a viernes, de 9 a 16 se reciben contingentes escolares con los que se organizan visitas guiadas. “De esta forma podemos adecuar los contenidos o la manera de explicarlos dependiendo de las edades y generar una motivación mayor”, apunta la funcionaria.
La idea es que el galpón se transforme virtualmente en un aula: “Si la escuela quiere estar allí dos horas, puede contar con una pantalla para las proyecciones que traigan los profesores, disponer de un pizarrón, bancos y todo lo que se necesite para llevar adelante la clase. Es una extensión para seguir haciendo escuela en otros espacios”, afirma Yacuzzi.
El público en general tiene acceso los sábados y domingos de 11 a 18. La entrada es libre y gratuita.
Pensado por grandes mentes
La producción integral del proyecto estuvo a cargo de la productora El Oso, cuyo equipo de creativos está a cargo del matemático Adrián Paenza.
La empresa trabajó en otros grandes emprendimientos, algunos en el propio predio de Tecnópolis pero, sobre todo, se dedica a los programas de televisión. De esa usina de mentes brillantes han salido productos tales como Desafío 20.16, Economía sin corbata, Alterados por PI, Grandes temas de las matemáticas y Juegos mayores, entre otros.
El Galpón de las Ciencias fue financiado con fondos municipales, pensado y convertido en realidad en muy poco tiempo, ya que comenzó a gestarse en el primer semestre del año. Fue inaugurado el 29 de julio por el intendente Ariel Sujarchuk y su esposa, la diputada nacional Laura Russo, durante una visita del candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires por el Frente de Todos, Axel Kicillof.
Una propuesta atrapante y enriquecedora, cerca de casa para todos los vecinos, que ayudará a despejar las dudas sobre fenómenos que acontecen a cada instante sin que nos preguntemos cómo se producen.
