MP El Juvenil, el garinense que es uno de los nuevos talentos del freestyle

Para viajar en el tiempo ya no hace falta subirse a un DeLorean, como lo hicieron Marty McFly y el doctor Emmett Brown en la mejor trilogía de la historia del cine. Los dos entusiastas no fueron los únicos en romper la barrera temporal y atravesar distintas épocas: en Garín hay un rapero que dice venir del futuro y está sonando cada vez más fuerte.

Tiene 23 años y se llama Miguel Pérez, pero todos lo conocen por su nombre artístico: MP El Juvenil. Hace siete meses lanzó 3000, su primer álbum de estudio, en el que promete “llevar al futuro” a cada persona que lo escuche.

El álbum contiene 18 canciones, en las que mezcla diferentes estilos y sonidos, y cuenta con la colaboración de varios referentes del género en español (Frijo, Mnak, Chino CNO, Obie Wanshot, Metalingüística y E.C.V, entre otros). Las letras hablan de superación personal, historias de amor y una vida marcada por el rap.

En su canal de YouTube, donde tiene más de 20 mil suscriptores, su corte Me inspiré orilla las 250 mil visualizaciones.

Antes y después del lanzamiento de 3000, el nombre de MP apareció varias veces en los principales portales de noticias –Infobae, Perfil, Página 12, Clarín, Filo News, entre otros-, que pusieron el foco en este nuevo talento del freestyle (duelos de rap improvisado), surgido del barrio Villa Angélica.

“Cuando estaba empezando a hacer música, hice un mixtape (recopilación de canciones) con un amigo y tirábamos rimas que decían ‘yo vengo del 2040, del 2030’”, y pensamos en hacer un disco que sea en base al futuro. Ese disco nunca se llevó a cabo. Pero cuando comencé a hacer música, me di cuenta de que el concepto iba más allá de nombrar ‘venir del futuro’, que uno visualiza todo el tiempo y que parte de mi vida es visualizar. Empecé a tomarlo como filosofía de vida, ley de atracción”, cuenta en una de esas entrevistas.

“El concepto llegó con esta filosofía de vivir en el presente proyectando cosas a futuro y aprovechar las oportunidades. Ahí todo empezó a fluir”, agrega, motivado por los avances logrados siguiendo esa premisa.

“Hacer algo distinto”

MP -las siglas de su nombre y apellido- ganó notoriedad hace dos años, cuando fue convocado a la competición de freestyle más importante del país en reemplazo de Papo MC, el campeón de 2016.

“No fui con el pensamiento de ‘voy a ganar’, fui con el pensamiento de ‘voy a cambiar mi vida’. Nace de ahí, el concepto de visualizar algo mejor pero no desaprovechar las oportunidades del presente. Visualizaba todo el tiempo mi vuelta a las batallas y en un momento me di cuenta que era mi propia mente visualizando un futuro”, relata, haciendo un juego con el concepto futurista que expone en su música.

“Yo ya quería demostrar que lo que estaba haciendo era algo diferente, que de verdad era algo adelantado. Todo el tiempo, las cosas pueden ser simples y me las rebusco a propósito para demostrar que puedo hacer algo distinto con lo sonoro, las melodías… más allá del ingenio y las métricas, darle algo futurístico”.

Duelos y batallas

A pesar de invocar constantemente el futuro, el rapero garinense tiene un pasado de esfuerzo y crecimiento forjado en su terruño. La competencia conocida popularmente como Crudo, que se realiza todos los años en la plaza que está al lado de la estación de Garín, fue testigo de cómo tiraba sus primeras rimas en público siendo un niño.

“En Garín y Escobar fueron las primeras competencias que pisé. Ahí vi las primeras batallas cuando tenía 12 años, todo ese mundo que veía en las películas o en las batallas de España”, rebobina.

Desde ahí su carrera manifestó un ascenso meteórico. Primero pasó por el Quinto Escalón, competencia que se organizó hasta 2017 en el parque Rivadavia de Capital Federal y de la que salieron exponentes como Duki, Wos, Trueno y el escobarense Lucho SSJ. En 2016, con apenas 16 años, MP salió campeón de una fecha del certamen.

“Mi filosofía es vivir en el presente proyectando cosas a futuro y aprovechar las oportunidades. Ahí todo empezó a fluir”.

Después se consagró campeón nacional del torneo A cara de Perro 2018 y participó en cuatro ediciones de la popular “batalla” entre freestylers organizada por una conocida marca de bebidas energizantes, en la que en 2021 terminó en el tercer puesto.

En el medio, también formó parte de la Freestyle Master Series (FMS) de Argentina, la liga profesional de rap estilo libre del país, y realizó una exhibición en el Lollapalooza 2022, en el Hipódromo de San Isidro.

Un pibe de barrio

En todos lados lleva impregnado como si fuera un tatuaje su pertenencia a Garín, donde nació, creció y aún vive, cerca del arroyo homónimo, junto a su familia y su pequeña hija.

La localidad aparece tanto en sus rimas como en sus videoclips. En uno de ellos se lo puede ver cantando con los inconfundibles edificios del barrio 24 de Febrero de fondo.

“Los primeros eventos en Escobar me acuerdo que se hacían en la plaza de la estación, justo al lado del tren negro; en un lugar que se llama Dr. Tazo y en la plaza de Malvinas”, recuerda.

“Todo el tiempo, las cosas pueden ser simples y me las rebusco a propósito para demostrar que puedo hacer algo distinto”.

“Garín, Benavídez, Maschwitz, Escobar y General Pacheco son los lugares en los que gané rodaje, fui encontrando mi estilo en los primeros años antes de ir a Capital, al Sur y el Oeste. Por eso le tengo mucho cariño a toda esta zona”.

Hasta ahora, sin embargo, nunca tuvo la oportunidad de presentarse de local sobre un gran escenario, algo que reconoce como una asignatura pendiente: “Claramente me gustaría dar un show masivo para toda la gente que me vio crecer e ir construyendo granito a granito lo que somos hoy en día, tanto en lo sonoro como en la imagen, ideales y valores”, fue su respuesta a DIA 32.

Buscando el flow

No todo fue color de rosa en la carrera artística de MP. El rápido ascenso en la escena del rap trajo consigo un agotamiento lógico y la necesidad de parar durante dos años. “Salí del radar para alejarme de la toxicidad de las competiciones”, explica.

“Me descontaminé cuando me encerré en el estudio. Me llené de otra energía que eran los flows, el sonar bien, los tips que me daban los productores”.

Ese proceso de introspección le sirvió para grabar su CD y volver mejor que antes: “Llevé esa aura al freestyle, y cuando volví estaba totalmente renovado. Sentía que podía desarrollar un personaje, que era el pibito este del futuro que se había alejado un tiempo y volvía para llevarlo a cabo en el presente”.

“Es muy fuerte lo que voy a decir, pero creo que hoy, en cuanto a los flows y la manera de encarar el freestyle, si no soy el mejor, pega en el palo”, sostiene, optimista y sin falsa modestia.

El garinense MP disfruta de una actualidad inmejorable. Con sus rimas, hace vibrar a los miles de jóvenes que mueve este estilo en plazas, teatros y estadios, llevando la bandera de su ciudad como principal estandarte. A diferencia de Marty McFly, su música viene del futuro y solo necesita un micrófono para traerla al presente.