La Fiesta Nacional de la Flor cumple medio siglo y lo festejará con una edición histórica. Habrá expositores de todo el país, programas de televisión en vivo desde el predio y un sinfín de atractivos. Además, habrá un show de la cantante Soledad.

Por FLORENCIA ALVAREZ
falvarez@dia32.com.ar

Ver las florerías y los viveros colmados de flores es, por supuesto, obra de la naturaleza. Sobre todo en primavera, cuando las plantas despiertan después de haber dormido durante todo el invierno. Pero es también el resultado del trabajo de cientos de floricultores que los 365 días del año desarrollan una profesión tan gratificante como sacrificada. Esa tarea es la que se honra y se invita a compartir y conocer en una de las fiestas nacionales más lindas del país, la de la Flor. La que le da identidad a Escobar y la que impulsó su mote de Capital Nacional de la Flor.

La celebración, que arranca el 28 de septiembre y se extiende hasta el 14 de octubre, este año festeja su cincuentenario. Es por eso que la comisión directiva se propuso no dejar ningún detalle librado al azar y tirar la casa por la ventana, para que la fiesta sea inolvidable. Desde shows musicales gratuitos, invitados especiales, el tradicional desfile de carrozas y la elección de la reina -que en esta edición tendrán algunas variantes-, hasta programas de televisión que emitirán desde el predio floral y nuevos decorados que sorprenderán al público.

“Lo principal es que todo está preparado para homenajear a los que siempre fueron los protagonistas de este evento, los floricultores y las flores”, afirma el presidente de la entidad, Tetsuya Hirose. El eslogan de este año será “La fiesta de la floricultura argentina”, dado que van a participar, además de los locales, productores de doce provincias del país “que en años anteriores no pudieron hacerlo porque es muy difícil si no se cuenta con apoyo gubernamental”. En este sentido, la exposición recibirá un fuerte apoyo del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.

Un poco de historia

Corría el año 1964 cuando un cultivador de Matheu, y miembro del Rotary Club de Escobar, Arturo Brosio, dio a conocer su idea de festejar la semana del floricultor. Sus compañeros rotarios se sumaron a la iniciativa y así empezó a gestarse una fiesta que año tras año creció exponencialmente.

En sus primeras ediciones, el evento se realizaba en clubes y gimnasios. La reina era elegida en el campo de la estación del tren y las primeras carrozas comenzaban a desfilar por las calles ataviadas con flores. El público acompañó entusiasmado, tanto que al tercer año hubo que formar una comisión provisoria que manejara la Fiesta seriamente. Entonces, los organizadores salieron a la búsqueda de un vecino de Escobar que tuviera buena imagen y que estuviera dispuesto a representar a las instituciones. Así, la presidencia recayó en manos de Luis Juan Brussi, quien se mantuvo en ese cargo durante 30 años.

“Él poseía una envidiable visión empresarial y se rodeó de colaboradores de confianza. A los cinco o seis años de ser presidente, dijo que había que comprar un predio propio, porque esto no podía seguir así, estaba creciendo notablemente”, recuerda el coordinador de la Comisión de Eventos Especiales, Alejandro Sayour.

[wppg_photo_slider id=»164″]

En 1968, durante la gestión del intendente Alberto Ferrari Marín, la entidad obtuvo la personería jurídica, y en el ‘69 la recién formada Sociedad Civil Fiesta de la Flor adquirió seis hectáreas para levantar la primera Ciudad Floral de la República Argentina. Su predio de la calle Mateo Gelves cuenta con 170.000 m2 de parques y jardines, cinco pabellones y un lago artificial de 7.500 m2. Además, tiene el carrillón más importante en funcionamiento de nuestro país, del cual penden 18 campanas de bronce con un peso total de 2 mil kilos.

“Arturo Brossio era muy amigo del secretario de Agricultura de la Nación de aquellos tiempos. Él le presentó al presidente Arturo Illia a Brussi para que le acercara sus inquietudes y fue así que firmó el decreto catalogando a Escobar como Capital Nacional de la Flor”, precisa Sayour a DIA 32.

Para los habitantes de diversos lugares del país, visitar la exposición una vez por año se convirtió en una cita obligada. Después, también lo fue para mucha gente de los países vecinos. La Fiesta Nacional de Flor vivió épocas de gloria. Nadie quería quedarse afuera ni perderse las novedades en materia de floricultura. En la década del ‘70 varias elecciones de las reinas fueron transmitidas en vivo por la televisión. Todos querían ser parte y espectador. Sin embargo, en los últimos años, la fiesta fue perdiendo su majestuosidad. Según Hirose, “la falta de apoyo y de recursos, y a veces el mal tiempo, hicieron que últimamente viniera menos público, pero nunca perdió su brillo”.

La fiesta del medio siglo

Con más expositores que en ediciones anteriores y el crisantemo como flor emblema, en este 2013 la difusión comenzó a fines de agosto en muchos canales de aire y cable, así como también carteles lumínicos ubicados estratégicamente en distintos puntos de la ciudad de Buenos Aires.

La Cámara de Comercio de Escobar decidió volver a participar y puso en marcha un concurso de vidrieras bajo el leitmotiv de los 50 años de la Fiesta de la Flor. El Club de Leones también se adhirió: se encargará de decorar las calles principales con motivos florales realizados con luces de colores. Y los alumnos de la Escuela de Florihorticultura que funciona en el predio, serán guías de los contingentes turísticos orientando a los visitantes acerca de las flores y de cómo se plantan las determinadas variedades.

La elección de la 26º Reina Nacional Infantil del Capullo se realizará el domingo 29, a partir de las 16; mientras que el desfile de carrozas por el centro de la ciudad, que este año tendrá un gran número de participantes, se realizará el sábado 5, a partir de las 19. A continuación se hará la elección de la reina, con un show imperdible.

“En las últimas ediciones desdoblábamos el espectáculo: el desfile era el sábado y la coronación el domingo, para jugar un poco con la visita de los turistas, porque eso repercute favorablemente en lo económico. Pero este año vamos a coronar ni bien termina el desfile y va a ser totalmente gratuito”, explica Hirose.

[wppg_photo_slider id=»165″]

De esa manera, se intentará capitalizar al público que asiste al desfile, ya que después podrán disfrutar de la coronación que se realizará dentro del predio floral, pero fuera del área de exposición. La noche culminará con la proyección de un audiovisual alusivo al cincuentenario y un recital de la cantante Soledad Pastorutti.

Además, tres programas de Cocineros Argentinos, que elaborarán deliciosos platos con flores, se emitirán desde el predio. “Lo más importante será aprender con qué vinos se acompañan las flores, si tinto, rosado o blanco”, bromea Hirose. La entrada general para los escobarenses -presentando DNI- costará $25; menores de 10 años y jubilados -con carnet y DNI- pasarán gratis.

Por su parte, desde Presidencia de la Nación confirmaron que Cristina Fernández de Kirchner visitará la muestra el viernes 4. “Hay que ver si no surge algo que altere su agenda, pero sino la tendremos recorriendo el predio”, se entusiasma Hirose. La última vez que un mandatario nacional concurrió a la Ciudad Floral fue hace 20 años: Carlos Menem, en 1993.

Esta vez no estará la Feria de las Colectividades, pero habrá otras opciones gastronómicas para que la gente pueda disfrutar. A su vez, el Ministerio de Turismo de la Nación participará con un stand brindando información sobre las distintas regiones del país, y hasta será posible sacar un nuevo DNI en el momento en un trailer del Ministerio del Interior.

Pero claro que todas estas actividades son detalles al lado de lo realmente importante: la magnífica exposición floral que se está preparando y que seguramente brillará como en sus épocas doradas.

Dueñas de la corona

La reina es una figura emblemática de toda fiesta, es su fiel representante, pero, sobre todo, es la voz cantante del floricultor. “Ella tiene que vender y promocionar el evento adónde sea que vaya, así como también la vida del floricultor, del que labra y elabora el producto”, detalla el coordinador de la Comisión de Eventos Especiales, Alejandro Sayour.

Cada año se inscriben entre 70 y 80 chicas que sueñan con poseer la corona. Deben tener entre 16 y 25 años, ser argentina nativa, naturalizada o por opción, es fundamental que las chicas sean solteras y que no vivan a más de 200 kilómetros de Escobar.

Este año van a estar presentes casi todas las mujeres que fueron Reina Nacional de la Flor, desde el año 1964 hasta la última que entregará el cetro. Muchas están casadas y fueron abuelas, otras tantas viven en el interior del país o en el extranjero pero ya confirmaron su presencia. Una de ellas es Marcela Biglieri, electa en 1981, quien vive en Miami. “La más difícil va ser la primera reina, Teresa Yoshimiya, que vive en Japón, pero todavía no está dicha la última palabra”, señala Sayour.

A lo largo de cinco décadas, el historial de las reinas abunda en curiosidades y apostillas. Por ejemplo, pasaron cuarenta años sin que ninguna aspirante de Belén de Escobar fuera electa soberana. Desde Silvia Morandi, en 1971, hasta Yesica Larricar, en la última edición, ninguna reina había sido de la ciudad de la flor, aunque sí hubo de Garín y de Maschwitz.

La mayoría de las reinas hoy son profesionales. Hay muchas abogadas, contadoras, médicas y también algunas empresarias. En el año 1980 fue elegida Alejandra Schultz, quien luego sería madre de la conocida modelo Paula Chávez.

Otro dato particular es que la localidad de Saladillo es la que históricamente aportó más reinas, princesas y misses. En cuanto a las edades, solo hubo dos reinas menores de 18 años. Por lo general, las elegidas oscilan los entre 20 y los 22.

Una novedad de esta edición es que la reina del cincuentenario inaugurará atributos, ya que va a ser coronada por su antecesora con otra corona, en tanto que las princesas lucirán nuevas tiaras.

Comentar la noticia

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *